La fatiga es una alteración de cansancio o agotamiento prolongado que no se alivia con el descanso y presenta síntomas como pereza, insomnio, molestia muscular, fiebre, así como dolor en garganta, cuello y axilas.
De acuerdo con especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el síndrome de fatiga crónica (SFC) afecta a 500 mil mexicanos, al disminuir hasta en 50 por ciento su capacidad en las actividades diarias.
Este síndrome, también conocido como “encefalopatía miálgica”, perturba de manera sustancial a las personas en el ámbito, personal, familiar y sobre todo laboral. Es una enfermedad incapacitante generadora de depresión e inactividad, además de alejar a los pacientes de familiares, amigos y disminuir su desempeño laboral, provocando incluso la pérdida de trabajo.
Dicho aislamiento social, causado por la fatiga, reduce su calidad de vida, y pese a ser un padecimiento poco estudiado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) la considera un problema neurológico grave, en tanto, la notificación nacional de enfermedades infecciosas nuevas de Estados Unidos, la cataloga como un padecimiento recurrente y resistente a los medicamentos.
De acuerdo al IMSS, se desconoce el origen exacto de la afectación, pero una de las propuestas más sólidas es que se trata de una variación inmunológica, es decir, las defensas del cuerpo responden contra el sistema nervioso y los neurotransmisores, sustancias que trasmiten estímulos al cerebro.
Es difícil establecer este síndrome porque algunos médicos lo consideran casi invisible, ya que después de hacer la evaluación del paciente y realizar estudios de laboratorio, no encuentran razón aparente para esta sensación de fatiga. No obstante, en el Seguro Social se realiza un diagnóstico de exclusión, para descartar otra patología, debido a que la mayoría de las enfermedades virales presentan dolor muscular y fatiga.
El cuadro de fatiga crónica tiene un inicio bien definido y permanece más de 6 meses. No desaparece con reposo o sueño, ni tiene relación alguna con ejercicio o esfuerzo constante y, generalmente, el individuo tiene problemas de concentración, dolores abdominales, sensación de náuseas, mareos y alteraciones del estado de ánimo.
La sintomatología es variable, dependiendo del grado de severidad y exposición de indicios, pero todas las personas son proclives a padecer esta enfermedad, niños o adultos mayores; la única variante es que en las mujeres de 30 a 50 años ocurre con mayor frecuencia.
En lo que respecta al tratamiento, está enfocado a aliviar signos y síntomas, en el Instituto el tratamiento se realiza de manera integral con psicólogos, psiquiatras, médicos, atención psicológica con antidepresivos, analgésicos y ansiolíticos, además de que se promueve la actividad física moderada para disminuir la apatía.
La terapia grupal es de gran utilidad para modificar actitudes y evitar que las personas pierdan el trabajo. Las expectativas a largo plazo para estos pacientes son variables y difíciles de predecir, ya que algunos se recuperan completamente entre los seis meses y un año, pero otros pueden tardar más.
Los especialistas del IMSS recomiendan a las personas a conocer en qué consiste el síndrome y estén atentos a detectar los síntomas de fatiga crónica. Es frecuente su aparición cuando hay infecciones o momentos de estrés, por lo que se debe buscar asistencia médica al sentir fatiga intensa y persistente.
Es importante destacar que el médico puede determinar un diagnóstico de síndrome de fatiga crónica sólo después de descartar otros síntomas como infecciones, tumores, enfermedades neurológicas, endocrinas y psiquiátricas; por ello es necesario acudir con su médico familiar.
Diagnóstico
El médico puede determinar un diagnóstico de síndrome de fatiga crónica sólo después de descartar otros síntomas como:
Infecciones.
Tumores.
Enfermedades neurológicas, endocrinas y psiquiátricas.
Por eso, el IMSS exhorta a acudir al médico familiar.
FUENTE: IMSS
INFORMACIÓN IMPORTANTE
La información médica en este sitio está proporcionada como recurso informativo solamente y no debe ser usada con fines de diagnóstico o tratamiento.
Esta información no debe utilizarse como material educativo para el paciente, no establece relación de paciente a médico, y no debe usarse como substituto para diagnóstico y tratamiento profesional.
La consulta de este blog nunca puede sustituir a una consulta médica
Este blog está dedicado principalmente a la Fibromialgia, Síndrome de Fatiga Crónica, Sensibilidad Química Múltiple, enfermedades autoinmunes, reumáticas, dolor crónico y otras. También información sobre medicinas integrativas y alimentación saludable. "Siempre a nivel informativo".
No hay comentarios:
Publicar un comentario